Casale abre una nueva vía en la renovación de las plantas de amoníaco. Tras cientos de renovaciones con el objetivo de aumentar la capacidad y reducir las emisiones, llegó el momento de la reconversión “de gris a verde” con cero emisiones.
Casale aportará sus conocimientos técnicos y diseño de ingeniería básica para convertir la planta de amoníaco de Incitec Pivot Limited (IPL) en Gibson Island (Queensland, Australia) de gas natural a hidrógeno renovable como materia prima.
IPL se asocia con Fortescue Future Industries (FFI) en el proyecto, y actualmente se propone que FFI construya in situ una planta de electrólisis del agua y desarrolle y explote la instalación de fabricación de hidrógeno, mientras que IPL explotaría la instalación de fabricación de amoníaco. La nueva instalación de electrólisis del agua produciría hasta 50.000 toneladas de hidrógeno renovable al año y sustituiría por completo la actual materia prima de gas natural de Gibson Island. Este hidrógeno renovable se convertiría después en más de 300.000 toneladas de amoniaco ecológico para los mercados australiano y de exportación.
El proyecto es considerado técnicamente viable e IPL y FFI están llevando a cabo un estudio de diseño de ingeniería preliminar (FEED) que servirá de base para una posible decisión final de inversión.
El proyecto tiene el potencial de facilitar la transición de Gibson Island hacia un futuro renovable y la planta podría convertirse en la primera instalación existente en Australia capaz de producir amoniaco 100 % libre de emisiones.
“Agradecemos la confianza que nuestro cliente de larga data IPL depositó en nosotros, y nos llena de orgullo proporcionar nuestra tecnología y conocimientos para contribuir a un futuro más ecológico para Australia. Este proyecto acelerará la descarbonización de la industria y, además, demostrará que una instalación 'gris' existente puede convertirse a verde mediante recursos de cero emisiones, a la vez que se protegen los empleos a nivel local.
Casale siempre ha sido pionera en la implementación de tecnologías punteras en plantas existentes, maximizando el rendimiento de equipos reutilizados: este proyecto puede marcar la pauta para todas las plantas de amoníaco del mundo que tengan la ambición de volverse ecológicas”, declaró Federico Zardi, director ejecutivo de Casale.